El juicio por el robo que sufrió en octubre de 2016 en París Kim Kardashian empezó este lunes en París con la comparecencia de diez acusados y, como se esperaba, la ausencia de la estrella de las redes sociales, pese a lo cual había una enorme expectación.
La audiencia comenzó en la sala Voltaire, una de las de mayor solera del histórico Palacio de Justicia de París, con la identificación de cada uno de los diez encausados (nueve hombres y una mujer) que se van a sentar en el banquillo durante las cuatro próximas semanas y que comparecen libres, bajo control judicial.
El presidente del Tribunal de lo Criminal de París también formalizó la extinción de la acción judicial contra otro de los procesados en este sumario, que murió el pasado 6 de marzo.
Tampoco se va a sentar en el banquillo en este juicio otro hombre al que se ha declarado que no puede asistir por su estado de salud.
Estos dos casos ilustran que se haya utilizado el término de «yayoladrones» para referirse al grupo al que se atribuye el robo a punta de pistola a Kim Kardashian en la madrugada del 3 de octubre de 2016, ya que la mayor parte tienen más de 70 años.
Entre ellos el que se considera el cabecilla, Aomar Ait Khedache, que cumplirá los 70 a finales de esta semana y que dijo que está jubilado cuando el presidente le preguntó por su profesión.
O Yunice Abbas, que tiene 71 años y que es uno de los pocos que ha reconocido abiertamente haber estado implicado (los investigadores encontraron rápidamente su ADN), e incluso ha escrito un libro en el que relata la versión de los hechos.
Estos dos «jubilados», al igual que otros de los que están inculpados y en la misma situación profesional, como Marc Boyer, tenían un largo historial delictivo a sus espaldas, con muchos años de prisión. Sus condenas pasadas hacen que, en caso de que sean declarados culpables esta vez, sus penas se verían aumentadas por el agravante de reincidencia.
Se da la circunstancia de que tanto Aomar Ait Khedache como Marc Boyer se sientan en el banquillo junto a dos de sus hijos supuestamente también implicados, Harminv Ait Khedache y Marc-Alexandre Boyer, respectivamente.
Además, la única mujer encausada, Christiane Glotin (79 años) ha sido la pareja del primero durante muchos años.